También nos fuímos con la familia de mamá, mi tía Pili a pasar navidad a Morelia, que se está creando como un hábito, lo cual me agrada mucho.
Una cosa muy agusto, un tanto familiar, tanto así que mamá invitó a su novio a pasar navidad para allá y me da mucho gusto verla tan contenta y tan agusto consigo mísma.
Por otro lado fué pesado pasar esas fechas donde hay amor, paz y todas esos pedos y conviviendo con mi abuela y su enfermedad; la muerte de mi prima y ese tipo de cosas que nos dan en la madre a todos.
Aquí unas fotos con mis primos en EGO, Morelia, echando la peda; disfrutando de año nuevo vaya.
Pues cerramos un año muy cabrón, con muchas cosas tanto buenas como malas; pero siempre echandole ganas.
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